Por Victoria Grau

Nos encontramos en un momento en el que la compra y la venta de productos online está adquiriendo gran importancia. En el sector del gran consumo, es sorprendente ver como la gran mayoría de comercios ofrecen un servicio de compra online y hasta muchos de ellos cuentan con una aplicación propia para agilizar la compra.

Desde el mundo farmacéutico, no nos podemos quedar atrás y es por eso por lo que, aunque de una manera más pausada, cada vez son más las oficinas de farmacia que cuentan con un servicio de venta online. Hoy en día, en España, la venta online en farmacias supone 130 millones de euros (IQVIA).

La farmacia que está presente en Internet adquiere un segundo canal de venta y un contacto directo de los usuarios con la farmacia. Es necesario remarcar que por la vía online sólo se pueden vender aquellos medicamentos que no requieren receta médica para ser dispensados. Esta tendencia, también conocida como e-commerce, se puede llevar a cabo de dos maneras:

• Internamente, es decir, la farmacia cuenta con su propia web.
• Externamente, a través de plataformas de compra, como, por ejemplo, Promofarma o MiFarma.

El gran reto de las farmacias respecto a este tópico es dar con las mejores estrategias de marketing para tener presencia en la web y, sobre todo, para diferenciarse de la competencia. Para potenciar y diferenciar a la farmacia del resto de la competencia se recurre a la implementación de técnicas y acciones de marketing digital.

El número de farmacias en Internet crece constantemente dificultando la visibilidad de aquellas que no cuentan con un riguroso Plan de Marketing. Para convertirse en un punto de referencia para los usuarios, la farmacia online necesita destacar entre la multitud de competidores y, es evidente que el marketing será esencial para activar este canal de venta que está ganando cada vez más fuerza.

El marketing digital permitirá a las farmacias que deseen contar con el canal de venta online la implementación de campañas de publicidad digital, que potenciarán la compra de productos y/o servicios en cualquier momento y desde cualquier lugar. El uso de técnicas de marketing digital también permite a las farmacias tener un buen posicionamiento en los principales buscadores de la red y que los usuarios tengan un acceso rápido a los productos.

Una ventaja indiscutible es la comodidad de comprar a través de cualquier dispositivo fijo o móvil. No podemos olvidar que, además de la venta, la finalidad de la venta a través de internet también es transmitir confianza y seguridad a través de las campañas.

El e-commerce presenta muchos beneficios para las farmacias, ya que supone la venta de los productos mediante otra vía diferente a la tradicional. En una farmacia sin canal online, sólo serán posibles clientes aquellas personas que entren en la farmacia, en cambio, con una plataforma online los posibles clientes se amplían de manera descomunal. Actualmente, hay muchas personas que, sea por falta de tiempo o por otros motivos, anteponen la compra online a la presencial. No obstante, es importante remarcar la importancia del consejo farmacéutico, que en el caso de la venta online es inexistente.

Otro punto que comentar en cuanto al e-commerce, es la posibilidad de conseguir mucha información sobre hábitos de compra de la farmacia y sobre los datos de los clientes. Esto permitirá, por un lado, tener un informe detallado y estructurado sobre los hábitos y las tendencias y, por otro lado, al tener los datos de los clientes, se podrá hacer ofertas personalizadas a cada consumidor.

La venta de productos de farmacia online se está generalizando cada vez más y un buen conocimiento y uso de las herramientas que nos ofrece el marketing digital serán claves para que las farmacias puedan estar al día de las nuevas tendencias y no quedarse atrás.