La resistencia a los antibióticos, una de las mayores amenazas que vamos a enfrentar dentro de las próximas décadas.

Actualmente, vivimos en un mundo que se encuentra en constante movimiento, gracias a la facilidad y frecuencia con la que nos desplazamos de un lugar a otro, convierten la problemática en asunto de todos. Esto tiene relación en la manera en que los antibióticos y otros medicamentos van evolucionando. 

Los antibióticos son los medicamentos utilizados para prevenir y tratar las infecciones causadas por bacterias. La resistencia se da cuando hay una mutación por parte de las bacterias como mecanismo de defensa ante los fármacos. Gracias a ella, hay un aumento en los costos médicos por estadías más largas en los hospitales así como un incremento de la mortalidad.

Una de las razones principales es el uso indebido de los medicamentos. La excesiva prescripción, la automedicación dentro de la población y la baja adherencia, acompañados de malos hábitos de higiene, así como la falta de vacunación favorecen la resistencia.

Debemos tomar medidas para evitar que un futuro no muy lejano, los antibióticos existentes no sean capaces de combatir incluso las infecciones comunes. En nuestro rol como farmacéuticos así como el resto de profesionales en salud, debemos reforzar las medidas de higiene dentro de la población, fomentar la concientización sobre el uso racional de los medicamentos, en conjunto con las autoridades sanitarias y gobiernos de cada país.

Ana Cecilia Arce Brenes

Estudiante del Máster de Marketing Farmacéutico, UPF BSM.