Conoce la historia de uno de nuestros ex alumnos y cómo el máster ayudó en su consolidación y salida profesional.

Continuamos revisando cuál ha sido la trayectoria profesional de nuestros alumni después de realizar el Máster en Marketing Farmacéutico. Esta vez entrevistamos a Manuel Menezes, que cursó el programa hace ya dos años.

Nos acercamos a la sede barcelonesa de Sanofi, una de las cinco Big Pharma, para que Manuel nos explique cómo fue su paso por la escuela y las prácticas profesionales. También veremos cómo ha sido su evolución profesional dentro de la empresa desde que terminó el curso.

Entré en un programa que se llama Talent Graduate Program de Sanofi (TGP); es un convenio de prácticas pero va más allá. TGP es un programa para el desarrollo de jóvenes talentos que ofrece Sanofi en el que, además de recibir formación interna para obtener un conocimiento global de la organización, se proporciona una beca para realizar un máster relacionado con el rol que ocuparás durante ese periodo. Lo bueno del TGP es que te atribuye responsabilidades con impacto directo en el negocio y aprendes permitiéndote un desarrollo tanto profesional como personal. La compañía apuesta mucho por ti en ese aspecto y creo que es un punto diferencial que ofrece Sanofi.

En mi caso, fui seleccionado para el departamento de Marketing de la Unidad de Negocio de Esclerosis Múltiple de Genzyme, del grupo Sanofi, donde mis responsabilidades eran dar soporte al Jefe de Producto y al Director de la Unidad. Anteriormente había trabajado como Jefe de Producto en el departamento de Marketing en una empresa farmacéutica veterinaria durante dos años, donde adquirí conocimientos sobre marketing. Cuando tuve la oportunidad de entrar en el departamento de Marketing de Genzyme me encantó la oportunidad y quería aprender más; sentía la necesidad de especializarme en Marketing porque la carrera que había estudiado era del ámbito científico. Entonces comencé a buscar y también por recomendación decidí hacer el Máster en Marketing Farmacéutico de la UPF (MIF).

Lo que más me aportó mi paso por la UPF fue sin duda la visión estratégica del negocio, desde la detección de una necesidad no cubierta para los pacientes y el desarrollo clínico, hasta al acceso al mercado. Sobre todo en esta última, acceso al mercado y también comercialización del producto, la visión estratégica es clave ya que debes tener en cuenta a los diferentes interlocutores, y todavía más en el momento de actual restricción económica que estamos viviendo.

Para mí, que vengo del sector salud animal, el MIF me abrió las puertas a una nueva experiencia laboral y me dio el conocimiento y las bases para que pudiera actuar en mi día a día en el trabajo: lo básico sobre el ciclo de vida de un producto, la dinámica del mercado, el análisis de datos, toda la parte de creatividad e innovación y el componente digital (que era uno de los elementos que debíamos incorporar en la tesina).

La posibilidad de realizar las prácticas a la vez que cursaba el máster fue muy bueno porque todos los temas que íbamos tratando en clase, casi cada semana, luego los vivía en mi trabajo. Fue perfecto poder complementar la parte lectiva con la profesional y viceversa: aprender por un lado y, si tenía dudas, preguntaba a mi manager en la compañía y lo mismo, siempre intentaba buscar respuestas con los profesores para poder ponerlo en práctica.

Es cierto que es un año de dedicación absoluta a la vida académica y profesional, y lo tienes que conciliar con tu vida personal, ¡pero merece la pena! En el momento en que entré en Genzyme, la compañía estaba preparando el lanzamiento de dos productos innovadores para el tratamiento de la esclerosis múltiple, lo que también fue y está siendo una oportunidad única.

Acabé el máster en julio con la presentación del proyecto final pero el convenio de prácticas continuó hasta septiembre. Luego hubo una prórroga hasta diciembre y en enero me incorporé como colaborador de Sanofi con contrato indefinido. Mi rol actual es como Jefe de Producto júnior ocupando las mismas funciones, ahora con mayores responsabilidades y desarrollando nuevos proyectos dentro del departamento de Marketing. ¡Estoy muy contento y disfrutando al máximo de esta nueva etapa!

La posición de Jefe de Producto hace que sea necesario coordinar e interaccionar con todos los departamentos de la compañía: médico, ventas, compliance, acceso al mercado, legal, comunicación… Esto hace esencial la cooperación transversal y la orientación al cliente, muchas de las veces también al cliente interno.

Tienes que saber cómo involucrar al equipo para conseguir un único fin, recibiendo su soporte y apoyo al final; debes conseguir que las diferentes partes interaccionen y funcionen juntas. El desafío está en que te puedes encontrar que las prioridades no son las mismas para todos los departamentos y es ahí donde te toca organizar y decidir para lograr los objetivos en conjunto.

Sí, antes toda la actividad estaba muy focalizada en un solo interlocutor, el médico especialista, y ahora debes tener en cuenta a otros muchos interlocutores y de gran importancia, como los decisores y pagadores.

Creo que cada vez más y dependiendo de la patología y de la especialidad, vemos que el paciente se informa, busca activamente información sobre los nuevos tratamientos, sobre todo en Internet, convirtiéndose en paciente experto.

Desde el punto de vista de la estrategia del marketing farmacéutico y teniendo en cuenta el marco legal y las restricciones que eso supone en el caso de tratarse de un fármaco de prescripción, deberemos ser capaces de hacer que el paciente cuestione y se informe de la mejor opción terapéutica junto a su médico y “crear la demanda” del fármaco.

Los pacientes están teniendo y tendrán un peso todavía más importante a la hora de garantizar el acceso a fármacos innovadores junto a la Administración y principales decisores.

Otro target muy importante a tener en cuenta, relacionado con las nuevas terapias, y poco explotado hasta ahora, creo que será enfermería.

Por muy sencillo que parezca son tus creencias y tus vivencias. Por ejemplo, si a ti no te gustan los pinchazos y hay un medicamento que aporta una ventaja en cuanto a comodidad y tolerabilidad, porque es un oral y además ha demostrado su eficacia, el paciente al estar informado, planteará a su médico un cambio de tratamiento. Luego el especialista le dirá si es o no indicado para él y siempre tendrá la última palabra sobre el tratamiento. Pero el paciente discutirá y participará en el proceso de decisión con su médico sobre las nuevas alternativas de tratamiento disponibles.

Sobre todo como punto positivo, uno de los aprendizajes que más me influenció fue el incentivo a la creatividad, imaginación y uso del marketing digital y diferentes canales. Que no nos debemos “cortar las piernas” antes de proponer una idea y presentarla. Debemos evitar encasillarnos en lo tradicional y buscar novedades, y podemos poner como ejemplo el Marketing de gran consumo. Obviamente habrá que adaptarlo al entorno y regulación de la industria farmacéutica, pero la mayoría de las ideas no tienen por qué ser inviables. Es el típico eslogan de las grandes escuelas de negocio “piensa fuera de la caja”; pero al final si en el marketing farmacéutico nos dedicamos a hacer lo de siempre, será muy aburrido, tanto para nosotros como para los médicos que reciban los impactos. No hay que tener miedo de innovar y buscar cosas nuevas. Creo que en el máster te lo trasladan.

Otro aspecto a destacar es el contacto que te proporciona con diferentes profesionales de la industria farmacéutica y el conocimiento y experiencia que te aportan, es lo enriquece un máster como este. Hemos tenido como profesores algunos exalumnos del máster con los cuales disfruté muchísimo, sobre todo de su experiencia internacional: alguna que otra sesión se me hizo corta de lo interesante que era escucharles.

Muchas gracias Manuel por tu colaboración y regalarnos un ratito de tu tiempo. Deseamos que continúes disfrutando y evolucionando en tu excelente trayectoria profesional.

Ana Rosa Álvarez
Community Manager