Hoy en día es muy importante elaborar una estrategia digital para filtrar y actualizar los contenidos que se encuentran sobre nosotros en la web.

Después de leer varios artículos y blogs, logré definir sobre qué quería que fuera mi entrada aquí. En clases hablamos sobre la importancia de la marca personal, ya que es una nueva estrategia para alcanzar el éxito utilizando las herramientas 2.0.

Viendo una conferencia de TEDxCMU sobre el personal  branding, blogging y social media,  me quedó muy clara la utilidad de participar en el medio 2.0. Ojalá puedan verlo porque cuenta anécdotas interesantes del uso que le dio Jacob Cass a las redes sociales para conseguir trabajo y hasta para conseguir un visado en Estados Unidos.

Actualmente es relevante controlar y actualizar lo que se puede encontrar sobre nosotros en la web. Existen una gran variedad de redes a las que podemos recurrir para poner en marcha nuestro plan de marca personal: desde Facebook, Twitter y LinkedIn hasta Pinterest, Blogger y Tumblr.

Todas estas plataformas ayudan a posicionar nuestra marca y de esta forma a estar dentro de las primeras opciones de búsqueda en Google. Una vez  identificadas las redes sociales en las que deseas enfocarte, hay que decidir con qué estilo y con cuánta frecuencia se participará en ellas.

El personal branding nos ayuda a definir quiénes somos y cómo queremos que nos vean. En un artículo que leí, que se encuentra en este enlace,  identifica los 5 consejos para gestionar nuestra marca personal en Internet:

• Trabajar la reputación online
• Analizar el entorno
• Establecer estrategias
• Cuidar lo que dices y haces
• Utilizar herramientas de control y seguimiento

En un mundo donde consultamos nuestras redes sociales más de una vez al día, tenemos acceso a ellas en nuestros portátiles y celulares y estamos conectados todo el día, utilicemos estos recursos de forma inteligente, para formar conexiones. ¡Para hacer nuestro propio marketing personal!

Se trata de usar Internet más como un medio que permita que nuestros posibles “clientes” tengan toda la información, que les dé la confianza para comprar nuestro producto, para conocerlo, para estudiarlo o para sacar conclusiones a partir de lo que se dice de nosotros; sea cual sea el micromedio o dispositivo que utilicen, el formato en que lo busquen o la fuente con la que se encuentren.

Mariana Sarmiento